domingo, 27 de octubre de 2013

Teseracto


Teletransporto mis ideas a un lugar mejor. Coloco mis pensamientos ordenados por color en estanterías rojas puntiagudas, clasificando sus principios en finales camuflados, reverberaciones cilíndricas o pausas encerradas en pompas de jabón. Elijo uno al azar, me tumbo en la cama y dejo a las palabras desdoblarse y deslizarse hacia mis silencios de forma desordenada pero con límites impares. El reloj marca el ritmo causando estragos en Nepal, señalando una hora menos en intervalos de cinco minutos.
Entro en la cuestión y lanzo tres dados que dan la solución a la ecuación de la distancia en años sombra entre tu frío y mi espejo. Y cuando todo parece un caos contenido, con una mueca de calor descubro en el reflejo que sin quererlo ni evitarlo el sueño me ha alcanzado.

domingo, 13 de octubre de 2013

Luces de verano


Había pasado un año.
Un año después de aquella madrugada. Recordaba el miedo, las preguntas aplastando su cabeza. El temblor de manos, de tripa. La noche más larga del mundo por un móvil apagado adrede. Recordaba la salida del Sol, el evitar mirarse al espejo para no ver las sombras que le acechaban tras de sí. Salir de casa y notar la misma presión de las cuatro paredes que le acompañaron en el insomnio. Los paseos sin rumbo, sólo por la necesidad de ver pasar el tiempo.
Recordaba también a la persona que no dudó en estar a su lado, sus abrazos y sus palabras. Le salvó de caer en picado, de romperse por completo, y le prestó un saco de risas donde sólo parecían caber lágrimas. Sonrió al recordar a la mujer y su perro.

Las gracias ya te las he dado cien veces, pero mantente siempre cerca por si quiero dártelas otras cuantas.

De todo ello también le vino a la memoria las mentiras, hiladas y deshiladas sin rubor ni descanso. La indiferencia, el egocentrismo. Y las palabras falsas incrustadas en una bola de mierda más grande que el Tíbet elevado al cubo.
Recordaba todo. Porque cuando te destrozan por dentro, cuando lo hacen muy lentamente aún sabiendo que ya estás en el fondo, al fin y al cabo sólo te queda recordarlo, por el hecho de no querer revivirlo de nuevo.


Había pasado un año… Justo un año… Y ahora… Ahora sólo quedaba Picnic al borde del camino.

En la edad en que el deseo era más fuerte
Que los remordimientos, la culpa y la verdad
Saltaba sobre mí con mil promesas
Los periódicos hablaban de la guerra
Y a mí no me importaba nada más
Que darme los caprichos que esperaba
De cosas nuevas que poder probar
Esperaban que pidiera mil perdones
sobre cosas que yo quería decir
Nunca jamás tendrán ese momento

El deseo no dejaba más opciones

O estás conmigo o te vas de aquí
No quiero perdedores en mi equipo
No importa cómo pero va a pasar

Y aunque todos me veían en caída

Yo sabía que volaba mucho más
Nunca sabréis ni de lejos lo que siento
No me importa lo que penséis desde ahí

Hoy en día pienso poco en ello

Las cosas van mejor de lo que fueron jamás
Lo importante es que no quede nada dentro

No quedaron atrapados los deseos

No, no pienso claudicar
Nunca voy a pedirte una disculpa
Lo hecho está porque era lo que había
También está porque yo lo quería
Lo quería más que a todos los secretos
Más que a la justicia o la verdad
Lo quería aunque acabara con mi vida
Pero no acabó con ella, sigo aquí

¡Sigo aquí!



http://www.youtube.com/watch?v=Xnl1SwexYfA


PD: Ya la he encontrado http://raggamovirektor.blogspot.com/2012/11/blog-post.html :)